He recuperado una medida humana de mi vida
En plena debacle, mi vida es más humana
Hacía muchos años que no lo vivía así
Tantos, que lo había olvidado.
Comer en la mesa, a la hora de comer, comida caliente
Comprar el pan dando un paseo
Entrar en las tiendas del barrio, comentar con los vecinos...
Elegir y preparar qué me apetece comer hoy
Leer un ratito en mitad del día y dejarme secuestrar por un sueño tan rápido como profundo y reparador
Dar una caminata por el campo después de comer
Sentir el sol y disfrutarlo sin tener que esperarlo el fin de semana.
Acercarme andando a la biblioteca y seleccionar tranquilamente mis paraísos
Pasarme por la librería del barrio , charlas con las libreras, encargar mis libros...
Salir a correr sin prisas, disfrutar de hacerlo
Estirar en casa antes de una rica ducha con la cama esperándome
...
Menudencias cotidianas para mucha gente, seguro
Conquistas simples que mi respiración había olvidado
Las cuido al tiempo que las saboreo
Me gustaría prometerles que no las abandonaré
Y sería la única forma de no abandonarme
En los tiempos más inhumanos, mi vida es más humana
Otra lección que incorporar a piel.