miércoles, 1 de junio de 2016

Los lunes al sol

Los lunes al sol. Y los martes a Pasapalabra y los miércoles a Saber y Ganar. Los jueves, documentales de La 2. Los viernes, quizá un respiro. El fin de semana nos iguala a todos: no hay que ir a trabajar.
Otras semanas serán de Sálvame o de Aquí no hay quién viva. Y otras de calle, cervezas, alcohol.
Muchas serán de ansiolíticos que permitan dormir para poder despertar de esa pesadilla que supone respirar(que ya nos advirtió Kafka, es arriesgado).

El parado no para. No puede permitírselo. Busca incansablemente ya no sabe bien qué. Su cabeza no descansa. No puede permitírselo. Como no puede permitirse  salir al cine o comprar un libro. El parado no para. Agotado lo único que se permite es buscar ese sol , los lunes o cualquier otro día, para calentar la grieta que lo invisibiliza y que lo convierte en lo que no es. Le han perdido la fe en sí mismo y así, ya no es capaz de ilusionarse ni vivir.