lunes, 27 de enero de 2020

Sin toalla

Ayer me encontré con mi padre de pie.
Era una foto de no hace mucho tiempo. 
Fue como un tiro al corazón. 

 Ayer volví a entender la derrota de mi padre y cuántas veces soñará que camina, que se levanta, que su cuerpo vuelve a ser suyo...
 Ayer la toalla que mi padre ha tirado me golpeó la cara como el guante de un reto sin futuro. 
 Porque sé que mi padre muy tarde y entre tinieblas ha comprendido que nunca más podrá hacerse una foto como esa.

Se siente traicionado no sabe bien por qué o por quién. Como yo. Me tiene a mí, "ángel desleal", y sé que le duelo. Como a mí.

Ya, sin toalla, no hay espacio para la alegría ni la esperanza. 
La luz rehuye. Quizá anhelando la calma total. 
Y no es tan fácil.
Resultado de imagen de tirar la toalla